Los demócratas valoran las contribuciones positivas de todos, padres, niños, trabajadores y empresarios, y en los Estados Unidos, hay aproximadamente 57 millones de personas con discapacidades entre nosotros. Desde la aprobación de la histórica Ley de Estadounidenses con Discapacidades (ADA), dirigida por muchos demócratas en el Congreso, los estadounidenses con discapacidades han podido participar más plenamente en nuestras comunidades. Hemos recorrido un largo camino desde la promulgación de la ley ADA, pero todavía queda mucho por hacer.

La administración de Obama realizó importantes inversiones en servicios de rehabilitación vocacional para favorecer el acceso a la capacitación laboral, la educación y la colocación, y para aumentar los fondos para la Ley de Educación para Personas con Discapacidades. Sin embargo, la administración de Trump y los republicanos del Congreso están trabajando activamente para eliminar los derechos civiles de los estadounidenses con discapacidades debilitando el cumplimiento de la ley ADA, disminuyendo la inclusión de las personas con discapacidades en las escuelas, reduciendo los programas de vida autónoma y reduciendo los programas de capacitación laboral y de accesibilidad a la fuerza laboral.

Mientras que los republicanos eliminan las protecciones para las personas con discapacidades, el Partido Demócrata trabaja para ampliar la igualdad de oportunidades, aumentar la participación en nuestra fuerza laboral y mejorar el acceso a la vida autónoma de las personas con discapacidades. El derecho a vivir en comunidad es un derecho civil y constitucional que con mucha frecuencia no se otorga a los estadounidenses con discapacidades, aunque también sabemos que los servicios y asistencias en el hogar y en la comunidad no son solo los que las personas quieren, sino también los que son más rentables. Por eso, los demócratas del Senado introdujeron la Ley de Integración para Personas con Discapacidades, un proyecto de ley bipartidista para garantizar que ningún estadounidense con discapacidad no tenga el derecho y la oportunidad de vivir en forma libre y autónoma en la comunidad. Cuando se promulgue, esta legislación brindará a las personas con discapacidades que viven en instituciones la oportunidad de experimentar la misma dignidad y libertad que cualquier otro ciudadano. Los demócratas están orgullosos de apoyar esta legislación histórica de derechos civiles y de respaldar a la comunidad de personas con discapacidades trabajadoras para asegurar su promulgación.

Los demócratas continuarán nuestros esfuerzos para defender la Ley de Estadounidenses con Discapacidades contra los ataques destinados a socavar los derechos de las personas con discapacidades, y trabajaremos para garantizar que a los trabajadores con discapacidades ya no se les nieguen las protecciones laborales disponibles para todos los demás estadounidenses. Apoyamos un salario justo para todos los trabajadores mediante la eliminación del salario mínimo para personas con discapacidades de acuerdo con la Sección 14(c) de la Ley de Normas Laborales Justas.

Desafortunadamente, los republicanos del Congreso no han mostrado ninguna voluntad de defender a la gente que se supone que representan. De hecho, están empeorando las cosas.

El presupuesto de Trump propuso recortar los fondos para programas como Medicaid y el Seguro Social que son el sustento de las personas con discapacidades. La administración de Trump ha dificultado que las personas con discapacidades obtengan la atención que necesitan al permitirles a los estados imponer requisitos de trabajo complejos para Medicaid.

La administración de Trump anuló las pautas de educación que detallan los derechos de los estudiantes con discapacidades en las escuelas. Los republicanos en el Congreso se han centrado en debilitar la aplicación de la ley ADA mediante la eliminación de incentivos para que las empresas cumplan, lo que potencialmente limitaría el acceso a las empresas de millones de estadounidenses.

Los demócratas se enorgullecen de asociarse con activistas con discapacidades para luchar contra estos ataques y lograr la plena integración e autonomía de los estadounidenses con discapacidades.