FAMILIAS Y MIEMBROS DE SINDICATOS

El Partido Demócrata cree que cuando los trabajadores son fuertes, los Estados Unidos son fuertes. Los demócratas facilitarán a los trabajadores, del sector público y privado, el ejercer su derecho a organizarse y afiliarse a sindicatos.”

Durante décadas, los demócratas han estado del lado de los sindicatos en defensa de la remuneración justa y la seguridad económica. Los demócratas entienden que los sindicatos ayudaron a construir la clase media de los Estados Unidos, y el trabajo organizado sigue siendo fundamental para cumplir con la negociación básica de los Estados Unidos: si se trabaja duro y cada uno hace su parte, deberían poder avanzar y seguir adelante. Necesitamos fortalecer y proteger a la fuerza laboral de los Estados Unidos.

Gran parte de lo que ahora damos por sentado (la semana laboral de 40 horas, el salario mínimo, el seguro médico, las vacaciones con goce de sueldo, las jubilaciones, el Seguro Social y Medicare) fue posible gracias al trabajo arduo y la lucha dedicada del movimiento de trabajadores estadounidenses.

Fueron los sindicatos los que lideraron la lucha para mejorar las condiciones de trabajo y las normas laborales y ayudaron a construir la clase media más grande de la historia. Los sindicatos demuestran que somos más fuertes juntos que separados.

En la presidencia de Obama, el Departamento de Trabajo y otras agencias federales fortalecieron los derechos de los trabajadores. Entre otros avances, la administración del presidente Obama actualizó y modernizó las regulaciones sobre las horas extra en virtud de la Ley de Normas Laborales Justas, aclaró y fortaleció las normas que prohíben la discriminación contra las trabajadoras embarazadas y reprimió el abuso de las clasificaciones de trabajadores contratistas independientes.

Los demócratas quieren invertir en empleos bien remunerados, aumentar el salario mínimo, fortalecer las normas de horas extra, invertir en pasantías y capacitación de alta calidad, proteger a los trabajadores contra la explotación y proteger la seguridad de la jubilación. Siempre que el gobierno de Trump actúe en contra de los mejores intereses de los trabajadores estadounidenses, los demócratas contraatacarán.