Día 21: ‘La seguridad fronteriza no va a pagar mi hipoteca’
January 11, 2019
Al día veintiuno del Cierre de Trump, los caprichos del presidente continúan afectando las vidas de 800,000 trabajadores federales que se encuentran en despido temporal o trabajando sin pago. Mientras los trabajadores federales luchan por pagar sus hipotecas y facturas mensuales, ayer, el presidente viajó a la frontera en McAllen,Texas para participar de un espectáculo publicitario. Al negarse a firmar una legislación bipartidista, Trump continúa con su cierre sin el apoyo de la mayoría del pueblo estadounidense, e incluso de miembros de su propio partido. Esto es lo más reciente:
Univision: “La seguridad fronteriza no va a pagar mi hipoteca”: empleados federales sufren las consecuencias de trabajar sin cobrar
Por Maria Luisa Tabares
Aunque no reciba dinero, Marc Schneider, controlador aéreo en Indianápolis, tiene que seguir presentándose al trabajo porque su labor es esencial. Este padre de familia de 48 años es uno de los 420,000 empleados federales que no ha dejado de trabajar durante el cierre parcial de gobierno y este viernes no recibirá su quincena.
Schneider tendrá que esperar a que el Congreso se ponga de acuerdo en el presupuesto de donde sale su paga, que pende de una disputa por el financiamiento de un muro fronterizo que para Schneider es ahora la menor de sus preocupaciones. “La seguridad fronteriza no me va a pagar mi hipoteca el próximo mes, no es una necesidad inmediata para mí en este momento. Preferiría poder pagar mis cuentas y cuidar a mi familia,” advirtió en una entrevista con CNN.
Aunque algunas agencias federales continúan operando con normalidad por fondos que ya habían sido aprobados para todo el año fiscal (que termina en septiembre), muchas otras están sufriendo las más duras consecuencias de la falta de financiamiento durante el cierre administrativo parcial de gobierno.
Y no solo se trata de los servicios públicos que empiezan a reducirse y afectar a los ciudadanos como el cierre de Parques Nacionales, programas de salud, cortes federales, entre otros; las personas que trabajan para los múltiples departamentos que se han quedado sin financiamiento ahora no tienen con qué pagar sus rentas ni sus cuentas, porque la realidad de muchos es vivir cheque a cheque…